Parece ser que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea y en concreto la Sección de Medicina Aeronáutica, se están interesando por la parte psicológica que se lleva a cabo en los reconocimientos de tripulaciones aéreas. Nunca es tarde si la dicha es buena, toda vez que la última ocasión en la que se intentó hacer algo de coordinación en dicho tema fue en el año 2003.
Tengo verdaderas esperanzas en que la nueva dirección de la Sección de Medicina Aeronáutica lleve a buen puerto este trabajo que está en sus inicios, pero que está.
De las conclusiones de este grupo de trabajo pueden salir beneficiadas todas las partes, AESA, SMA, medicina, psicología, y sobre todo la profesión aérea.
Sin duda es una buena noticia.
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